El reportaje que os traemos hoy se emitió a principios de año pasado en el programa “Basta” de één, el primer canal de VRT (la televisión pública de Flandes, Bélgica).
En la edición que podrán ver más abajo, colaron a Maxime De Winne, un infiltrado suyo, como presentador de CALL TV durante varios meses. De esta forma, demostraron que las productoras ocultaban expresamente las indicaciones en pantalla que por Ley deberían mostrar.
Asimismo, también ofrecieron pruebas de que hacían caso omiso a la prohibición de que participen menores de edad.
Pero esto no es todo: el equipo del programa contactó con Gaëtan de Weert, que llevaba largo tiempo analizando las respuestas de los concursos para obtener el patrón de resolución, con el fin de explicar a los espectadores la aleatoria y retorcida metodología que usaban estos programas, llegando al punto de reventar un call-tv en directo.