En un partido de los Diamondbacks de Arizona uno de los jugadores regala una pelota a unos chicos de la grada, varios jóvenes se pelean por el trofeo, pero finalmente el chico que consigue quedárselo decide tener un bonito gesto que ha dado la vuelta al país, tanto es así que el chico ya ha salido en la tele cómo ejemplo para los más jóvenes, y ha sido invitado a participar en el saque de honor del siguiente partido